Fuente al Marques del Campo - Gran Via Marques del Turia

Mariano Benlliure realizó una obra magnifica y de gran belleza artistica y su esplendida labor se vio compensada con la medalla de oro en la Exposición Internacional de Bellas Artes de Munich de 1894, y anteriormente , en el año 1890, en la Nacional de Madrid con primera medalla por la magnifica figura que representa a la Navegación, en el monumento al marqués del Campo.

Pero este monumento tuvo en su realización diversas incidencias que durarón bastantes años. Sobre todo desde la muerte de don José Campo, acaecida en Madrid en 1889. Las figuras, por haberlas pagado el marqués, quedarón en poder de su hijo adoptivo, José Luis Bruna, que heredó el título y quien, finalmente, hizó donación de las obras al Ayuntamiento de Valencia.

Trasladadas a Valencia las estatuas, aún permanecierón largo tiempo expuestas al público en espera de levantarse el pedestal, en los jardines de la entonces llamada plaza de Emilio Castelar, frente a la fachada del Ayuntamiento, hasta que el alcalde don Francisco Maestre, en los comienzos del año 1909, cercana la inauguración de la Exposición Regional Valenciana, decidió completar el monumento al marqués de Campo, cuya figura y la de la Caridad habían sido instaladas en sus pedestales el año anterior, quedando finalmente terminada la obra.

En los jardines de la céntrica plaza permaneció el monumento al marqués de Campo durante mucho tiempo, hasta el año 1933, en que, debido a las poco afortunadas obras de ornamentación central, con la instalación de la alta y pétrea mole que cubria el pequeño mercado de flores, fué trasladado a la plaza de Cánovas del Castillo, en la Gran Vía Marqués del Turia, donde se muestra con toda su belleza el conjunto monumental dedicado a don José Campo, una de las mejores obras realizadas por Mariano Benlliure, el famoso y genial escultor valenciano.

Uno de los monumentos artísticos más destacados de la ciudad de Valencia es el dedicado al marqués de Campo, obra magnifica del genial escultor valenciano Mariano Benlliure.

Don José Campo Pérez Arpa y Vélez fué un valenciano que, por espacio de muchos años, estuvo ligado a la vida de la ciudad que nunca olvidó y favoreció siempre, especialmente cuando sus altas empresas y grandes negocios alcanzarón mayores vuelos en el ámbito nacional.

Había nacido en Valencia el día 22 de mayo de 1817, hijo de un rico y prestigioso comerciante aragonés establecido en la plaza del mercado, negocio que continuaria despues el joven José Campo, dándole enorme impulso, desplegando condiciones excepcionales de iniciativa audaz, actividad incansable y energía indomable. Al mismo tiempo se dedicó a la politica española, militando en el partido moderado de Narvaez, y cuando éste triunfó, en 1843, al subir al trono Isabel II, fué nombrado Jose Campo, cuando contaba veintiocho años de edad, alcalde de Valencia, iniciando las mejoras urbanas que necesitaba la descuidada capital. Así promovió y realizó el adoquinado de las calles valencianas, que entonces carecian de pavimentación; dió nuevo y definitivo impulso a las obras del puerto; estableció el alumbrado de gas y electricidad; hizo posible con su intervención y su dinero la traída de las aguas potables; creó los primeros ferrocarriles valencianos ....

En el año 1860, don José Campo trasladó su residencia a Madrid, donde promovió mayores negocios y continuó la vida politica. Había sido elegido varias veces diputado a cortes por Valencia y también senador. Cuando en 1875, fué proclamado rey de España Alfonso XII, el primer titulo que concedió fue el de marqués de Campo para el insigne valenciano, a quien agració también con la senaduría vitalicia. Además don José Campo ostentó también la Gran Cruz de Isabel la Catolica y la de Mérito Naval.

Valencia, agradecida al marqués de Campo, decidió erigirle, aún en vida suya, un monumento. La idea surgió en el año 1884, cuando el opulento banquero, completando una obra benefica suya, había inaugurado el nuevo edificio para instrucción y asilo de parvulos, hijos de modestas familias de la calle Corona, esquina a la de Beneficencia, acto que tuvo especial relieve en aquella época, asistiendo, con las autoridades, el marqués de Campo y su esposa doña Rosalia Rey.

Aquel esplendido edificio perdía visibilidad en calles tan estrechas y el Ayuntamiento proyectó una gran plaza -que no se llevaría a efecto- y en su centro la estatua del marqués de Campo. Así se acordó, designándose para realizar la obra al joven escultor Mariano Benlliure, que por entonces habia obtenido ya máximos galardones en diversos certámenes artísticos y alcanzaba merecida fama.

Mariano Benlliure tenía excelente amistad con el marqués de Campo, quien protegía en los primeros tiempos al escultor, el cual trazó el boceto del monumento, que fué muy del agrado de todos. Sobre un rectangulo, de cuyos lados parten anchas escalinatas, que dan acceso a un alto pedestal, donde se halla instalada la esbelta figura del marqués de Campo, que tiene a su lado a su pequeño hijo. Bajo, sobre cuatro pedestales, cuatro estatuas simbolizando las más destacadas empresas industriales del famoso valenciano: el ferrocarril, representado por un hombre que se apoya en una rueda de locomotora; la navegación, por una matrona sobre un timón; el gas, por un joven portador de un mechero, y, al frente, como demostrando que sobre todos los triunfos comerciales de aquel a quien la obra consagra, está la Caridad, que Benlliure había representado en una monja enseñando a leer a unos pequeñuelos, recuerdo de la fundación del asilo de Campo, en Valencia. El escultor, por indicación del marqués, había modelado en la monja el rostro de la esposa de don José Campo.

En el dorso del pedestal donde se encuentra situado el Marques de Campo, hay una inscripción que dice: Iniciador de las reformas urbanas de Valencia en el siglo XIX.