Grandes civilizaciones
Los filisteos

Los filisteos fueron un pueblo que habitaron en la franja litoral del Mediterráneo oriental, en zonas de la actual Gaza y el sur del actual Israel. Su lugar de procedencia se ignora, la teoría más extendida (que no única), es que los filisteos fueron uno de esos pueblos que la historiografía ha denominado como "pueblos del mar", grupos de gentes, que procedentes no se sabe donde, llegaron hacia el 1200 a. C. (siglo XII a. C.) a territorios de Anatolia, el Levante mediterráneo y Egipto, en el periodo histórico conocido como Edad del Bronce. Aunque no todo el mundo está conforme, la teoría más extendida es que su lugar de procedencia tenía que estar en el mundo Egeo, aunque desconocemos que les pudo obligar a embarcarse y emigrar a otros lugares, ya que esta emigración no buscaba la conquista de un territorio, pues el movimiento migratorio incluía mujeres y niños, eran por tanto pueblos en marcha en busca de un nuevo futuro. Estos pueblos migrantes tenían raíz indoeuropea que contrastaba con la raíz semítica que tenían los pueblos del Medio Oriente.

La representación gráfica de estos pueblos los encontramos en el templo egipcio de Medinet Habu, donde se glosa la gesta del faraón Ramsés III (r. 1184 a. C. - 1153 a. C.) derrotando a estos pueblos del mar y a unos en particular, representados por unos tocados de plumas en la cabeza y que las fuentes egipcias identifican como los purasatiu o peleset.

A los pueblos del mar se les asocia con la desaparición del imperio hitita (en Anatolia, actual Turquía) y el imperio de Mitanni (en la actual Siria), además de provocar el debilitamiento del imperio egipcio. Las fuentes egipcias que mantuvieron enfrentamientos armados con ellos, los denominaron purasatiu o peleset. Los hebreos los denominaron pelistim y los helenos philistinoi de donde tomaron el nombre de filisteos y su territorio Filistea. Roma a partir del siglo II d. C. los llamó palaistinei que acabaría dando nombre a Palestina.

Los peleset o filisteos, rechazados por Ramsés III en el Delta del Nilo, se establecerían en zonas del actual Gaza y sur de Israel, en el territorio de Canaán, entonces bajo dominio egipcio. Desconocemos si esta ocupación fue militar o contaba con el beneplácito de Egipto.

El territorio filisteo estaba configurado por una federación formada por una pentápolis (cinco ciudades), a saber: Gaza, Ascalón, Asdod, Gat y Ecrón, cada una de ellas con su rey o príncipe independiente. Los filisteos dominaron el territorio hasta el año 732 a. C. (siglo VIII a. C.) en que fueron derrotados por los asirios y por su rey Tiglatpileser III (r. 744 a. C. - 727 a. C.), pasando a formar parte desde ese momento del imperio asirio en calidad de vasallos. A partir de este momento el destino de los filisteos quedó unido en gran medida al mismo destino que otros pueblos de la zona, después de la dominación asiria, vino la dominación babilónica, luego los persas aqueménidas, Alejandro Magno, etc. hasta que llegó un momento en que el pueblo filisteo desapareció como tal en la historia. Si quisiéramos poner una fecha oficial de desaparición del pueblo filisteo esta sería la del 604 a. C. cuando el rey de Babilonia, Nabucodonosor II (r. 605 a. C. - 562 a. C.) asola el territorio de Canaán sometiendo a todos los pueblos, incluido el reino de Judea, a su autoridad.

Frente a los que consideran que los actuales palestinos son descendientes de los filisteos, la historia nos demuestra que el pueblo filisteo desapareció al quedar sometido a los imperios regionales y asimilados a las culturas dominantes. Solo el nombre de Palestina como territorio, quedó en el recuerdo del antiguo pueblo de los filisteos.

Desconocemos como se llamaban a sí mismos los filisteos (endónimo) y cual era su lengua y escritura, pues bien pronto asimilaron cultura y lengua cananea y solo se conservan pequeños retazos o indicios de lo que fue su cultura primigenia. El dios principal del panteón religioso filisteo era Dagón (otros dioses eran: Baal, Astarté y Asera), un dios ampliamente reconocido en muchas zonas del Medio Oriente, por lo que no era exclusivo u original del mundo filisteo.

Los filisteos fueron contemporáneos en el tiempo con los hebreos (sus mayores enemigos), de todos es conocido el pasaje bíblico de David y Goliat, donde Goliat es un filisteo que es muerto por David (r. ca. 1010 a. C. - ca. 966 a. C.) con una pedrada lanzada con una honda. En la Biblia se citan en muchas ocasiones a los filisteos, también celebérrimo es el pasaje donde Sansón derriba el templo filisteo de Gaza con la sola fuerza de sus brazos, una vez recuperada su cabellera que le había cortado Dalila.

Menos conocido es el episodio de la muerte del primer rey de Israel, Saúl, después de ser derrotado por el ejército filisteo en la batalla del monte Gilboa (1010 a. C.). Esta animadversión entre hebreos y filisteos se trasluce en muchos pasajes del Antiguo Testamento (libro de Jueces y de Samuel).

Los filisteos junto con los hititas eran los dos únicos pueblos que conocían el secreto de la fundición del hierro, en una época en que el bronce seguía siendo utilizado para las herramientas y las armas, este conocimiento en el uso del hierro, les permitía una superioridad militar que no disponían el resto de los pueblos vecinos.