Iglesia de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir
Sant Nicolau i Sant Pere Màrtir - c/Caballeros, 35


La iglesia de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir es probablemente el mejor ejemplo de convivencia de un templo de estructura gótica del siglo XV con decoración barroca del siglo XVII que encontramos en la ciudad de Valencia. La iglesia se construyó sobre una antigua mezquita musulmana, englobándose en lo que se denomina las primeras doce parroquias cristianas. Declarada en 1981 Monumento Histórico Artístico Nacional.

Fue erigida como parroquia hacia 1242-1245 siendo una de las primeras iglesias parroquiales fundadas después de la conquista cristiana. La primitiva iglesia de la que no se conoce nada, fue rehecha a iniciativa del entonces rector de la parroquia Alfonso de Borja (futuro obispo de Valencia y futuro papa Calixto III), en estilo gótico entre 1419 y 1455. En esta última fecha el templo es terminado hacia los pies ocupando el lugar donde se encontraba el cementerio parroquial. También se construyó en este periodo la bóveda gótica de crucería en la nave central.

Aunque la iglesia mantiene y como tales figuran en su Altar Mayor, la titularidad de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir, la iglesia es popularmente conocida simplemente como de San Nicolás. El santo Nicolás fue obispo de Mira (actual Turquía), falleció hacia el 345 y se le conoce por el apelativo de Bari ya que sus restos fueron trasladados desde Mira a Bari (Italia) donde permanecen, ante el avance otomano sobre la actual Turquía. San Pedro Mártir (* Verona 29-06-1205 † Como-Italia 06-04-1252) nació en Verona de ahí que también se le conozca como San Pedro de Verona. Fraile y sacerdote dominico fue asesinado por una conjura hereje en 1252. Su asesinato se produjo con un golpe en la cabeza con un cuchillo de podar de ahí que se le represente con este instrumento en la cabeza.

Se trata de una iglesia de una sola nave de seis tramos, cinco capillas laterales no muy profundas entre los contrafuertes (seis a cada lado aunque dos de ellas están ocupadas por las puertas de entrada laterales), presbiterio poligonal orientado al este, al que le precede un tramo recto. La nave se cubre con bóveda de crucería simple. Tiene unas medidas de 41 metros de largo por 13 metros de ancho y 8,65 metros de altura hasta la cornisa. Tiene además una tercera puerta a los pies del templo. Detrás de la Capilla Mayor podemos encontrar la sala del trasagrario construida a expensas de Jacinto Sanz en 1664.

En 1676 las dos capillas laterales más próximas al presbiterio y que hoy forman el tramo recto previo a la Capilla Mayor, se remodelan y la del lado del evangelio se transforma en paso a la sacristía, mientras que la del lado de la epístola como bajada a la cripta. Los dos retablos formados por tablas del pintor Joan de Joanes situados en la actualidad junto al Retablo Mayor, proceden de estas dos capillas remodeladas.

Interior Entre 1690 y 1693 se recubre el interior gótico con decoración barroca al gusto de la época y se recubre la bóveda gótica por otra de las llamadas encamonadas o falsa bóveda; reforma atribuida a Juan Bautista Pérez Castiel. Aparte de la decoración churrigueresca del templo nos sorprenderá las pinturas al fresco diseñadas por Antonio Palomino y ejecutadas hacia 1700 por su discípulo Dionís Vidal (* Valencia ca.1670 † Tortosa-Tarragona después de 1719), quien recubrió las bóvedas góticas, arcos, pilares y muros con frescos con escenas de la vida de San Nicolás de Bari y de San Pedro Mártir, junto con alegorías de Virtudes y otros personajes del ámbito sacro en arriesgados escorzos. En total cerca de 2.000 m2 de superficie pintada lo que la convierte en la Capilla Sixtina valenciana.

Las escenas de la nave central por su lado del evangelio nos hablan de la vida de San Pedro Mártir, mientras que por el lado de la epístola la vida narrada es la de San Nicolás de Bari, las escenas guardan relación con la posición de ambos santos en el Retablo Mayor. Así se representan escenas desde la niñez, pasando por la predicación y milagros en vida, hasta llegar a su muerte y los prodigios que ocurrieron cuando se veneraban sus restos mortales. Unas aberturas ficticias abiertas en el techo sugieren la vista del cielo. Cada tramo que forma la bóveda narra un episodio de las vidas de los santos. Al llegar al presbiterio confluyen ambos relatos en una gloria de ángeles, doctores de la iglesia y arquitecturas fingidas. Acompañan las escenas de la vida de los santos, una pléyade de imágenes alegóricas.

La nave del templo formada por seis tramos, conforman un total de doce lunetos (seis por lado), en cada uno de ellos Palomino diseñó una escena pictórica con una figura central relativa a la vida del santo, un apóstol que guarda una relación aproximada con la escena anterior, dos alegorías o virtudes referentes a la escena comentada y dos ángeles de los distintos coros celestiales. Además una serie de cartelas con mensajes o citas bíblicas que al igual que en los casos anteriores guarda relación con la escena central narrada. Así y comenzando por la cabecera en los lunetos encontramos:

San Nicolás de Bari (lado de la epístola)
• Muerte de San Nicolás. Apóstol: Santiago el Mayor. Alegorías: la devoción y la correspondencia. Dos ángeles del coro de las potestades.
San Nicolas de Bari se enfrenta a Arrio en el concilio de Nicea. Una cartela bajo la escena dice: Imple facies eorum ignominia (libro de los salmos). Apóstol: San Bartolomé. Alegorías: la religión y el santo celo. Dos ángeles del coro de las potestades.
San Nicolás resucita a tres niños que habían sido descuartizados en un mesón para ser cocinados. Apóstol: San Felipe. Alegorías: la justicia y la verdad. Dos ángeles del coro de las virtudes. Bajo la escena una cartela dice: Si est lingua curationis, est et mitigationis (Eclesiastés).
• San Nicolás resucita a un niño cocinado por su madre loca. Apóstol: San Pablo. Alegorías: la caridad y la gratitud. Dos ángeles del coro de los principados.
• San Nicolás de Bari, dota a tres doncellas para contraer matrimonio. Apóstol: San Mateo. Alegorías: largueza y recato. Dos arcángeles.
• San Nicolás de Bari curando a una anciana enferma. Apóstol: San Pedro. Alegorías: la conmiseración o piedad y la limosna. Dos ángeles del coro de los custodios.

San Pedro Mártir (lado del evangelio)
• Milagro que realizó San Pedro Mártir después de muerto. Apóstol: Santo Tomás. Alegorías: la bienaventuranza sobrenatural y la inmortalidad. Dos figuras del coro de las Vírgenes.
El martirio a espada de San Pedro Mártir. Bajo la escena una cartela dice: Tinget sacerdos digitum in sanguine hostiæ (Levítico). Apóstol: Santiago el menor. Alegorías: La fe y la constancia. Dos figuras del coro de los mártires.
• San Pedro Mártir hace venir una nube para protegerse del sol y así poder convertir a un hereje. Apóstol: San Simón. Alegorías: la industria o ardid y la protección. Dos ángeles del coro de los santos confesores.
• San Pedro Mártir hace hablar a un niño mudo. Apóstol: San Judas Tadeo. Alegorías: la clemencia y la gracia. Dos ángeles del coro de los serafines.
• Toma de hábito de San Pedro Mártir como dominico, en el convento de san Nicolás de Bolonia de las manos de santo Domingo de Guzmán. Apóstol: San Andrés. Alegorías: la castidad y la vigilancia. Dos ángeles del coro de los querubines.
• San Pedro Mártir siendo niño predica delante de su tío hereje cátaro. Apóstol: San Juan Evangelista. Alegorías: la pureza o sinceridad y la doctrina. Dos ángeles del coro de los tronos.



A los pies de la iglesia a ambos lados del rosetón gótico los evangelistas San Lucas con el becerro (lado de San Pedro Mártir) y San Marcos con el león (lado de San Nicolás), mientras que los dos restantes evangelistas los encontraremos en la cornisa de la nave central. Los dos pintores (Palomino y Vidal) están retratados en el muro situado a los pies de la iglesia, al lado derecho del rosetón junto a San Lucas. Sobre la puerta y por debajo del rosetón gótico con la estrella de David, una representación de la Iglesia triunfante y una cartela que dice: Domus mea domus orationis vocabitur (Mi casa será llamada casa de oración). La iglesia está representada por una matrona que lleva la tiara papal, mientras que en una mano sostiene una iglesia y con la otra una cruz.

Sobre la contrapuerta interior o cancel, un tondo con la efigie de Alfonso de Borja, papa Calixto III quien antes de ser cardenal y papa fue rector (párroco) de esta iglesia parroquial. Alrededor del circulo una inscripción dice: "Callistvs III. Pont. Max. Alph. Borgia. Hvi. Eccl. rector".

Exterior De su pasado gótico aún conserva la sencilla portada de los pies formada por arcos apuntados y sobremontado por un arco conopial. Construida en la segunda mitad del siglo XV con arquivoltas abocinadas que descansan en delgadas columnas exentas de decoración. Sobre la misma un rosetón. Bajo el vértice del arco conopial encontramos un curioso relieve, con un plato de carne, alusivo a un milagro de San Nicolás. La decoración escultórica de la portada se ha perdido con el paso del tiempo, aunque permanecen las bases donde debían ir colocadas.

El rosetón gótico está realizado hacia 1455 a imagen y semejanza de la Estrella de David o sello de Salomón que podemos encontrar en la puerta de los Apóstoles de la Catedral de Valencia.

El milagro al que aludíamos es totalmente apócrifo, lo recoge Jaume Roig y nos cuenta que yendo San Nicolás de viaje, paró en una venta para cenar, el tabernero le sirvió un plato de carne, pero al ir a bendecir el plato se dio cuenta que la carne que le habían puesto era carne humana. El santo denunció al tabernero y en sus bodegas fueron encontrados los restos despedazados de tres adolescentes, que a la orden del santo resucitaron milagrosamente. Al santo en ocasiones se le representa con un caldero del que salen los tres niños resucitados.

En el tímpano de la puerta encontramos un relieve en estuco de tradición barroca, con la Virgen y el Niño entre nubes rodeados por un grupo de cabezas de ángeles con alas.

A la derecha de esta portada hay una capilla exterior cerrada con una verja que se llama del fossar porque en este lugar estaba antes el cementerio parroquial. En su interior encontramos un panel de cerámica representando la crucifixión y a sus pies San Juan y la Virgen María. La capilla se cubre al exterior con un tejado con la parte interior de madera y pintado con los elementos de la pasión de Cristo y en el centro las letras IHS (monograma de Cristo). En el muro de la izquierda de la capilla un panel cerámico pintado en tonalidades verdes que dice traducido del valenciano lo siguiente: "En el año 1962 de la Natividad de Nuestro Señor, gobernando en la ciudad el doctor Adolfo Rincón de Arellano y estando presente el teniente de alcalde Arturo Zabala, el excelentísimo Ayuntamiento de Valencia restauró bajo la dirección del artista Jaume de Scals la presente capilla del Santísimo Cristo del Fossar". Encima del mismo tres azulejos de las mismas características en forma de escudos. Todo el conjunto cerámico es obra de Jaume de Scals.

La otra puerta, que da a la plaza de San Nicolás, es sin embargo una recreación neogótica de 1864 realizada por Timoteo Calvo Ibarra (1799-1879), al igual que la fachada donde se enmarca. También es obra suya el pasadizo que recae a la calle Caballeros y que permite la entrada al templo por el lado contrario.

A la izquierda de la portada recayente a la plaza de San Nicolás, encontramos un panel de azulejos colocado por la Asociación de San Vicente del Tros Alt en Abril de 1957 que dice: "De esta parroquia de San Nicolás fue rector Alfonso de Borja, Calixto III quien canonizó a San Vicente Ferrer el 29 de junio de 1455 cumpliéndose así la profecía del santo". En el centro del panel vemos las dos escenas principales de la historia: a la izquierda San Vicente Ferrer realizando la profecía a Alfonso de Borja todavía niño en la cual le profetiza que alcanzaría el papado y que él lo haría santo y a la derecha al mismo Alfonso de Borja ya papa Calixto III decretando la canonización de San Vicente Ferrer tal y como le había anunciado años atrás.

Las capillas laterales que encontramos en su interior comenzando por la cabecera son:

Lado del evangelio

Capilla de San Dionisio. Sobre un retablo de estilo neoclásico, encontramos en el nicho central la escultura de San Dionisio, obispo de Atenas discípulo de San Pablo en el siglo I. Por delante del retablo, un icono al temple sobre tabla de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

Capilla de San José Capilla de estilo neoclásico del siglo XVIII. El retablo barroco es de madera tallada y dorada del siglo XX. En el centro del retablo y sobre un pedestal, talla de San José del siglo XVIII atribuida a Ignacio Vergara.

Puerta entrada callejón calle Caballeros En este lugar y en el interior de una hornacina podemos ver un pequeña escultura de San Bruno y bajo ella una cartela que dice: Silencio. Es una de las tres puertas de que dispone el templo.

Capilla de San Rafael Arcángel o de los Santos Arcángeles Capilla barroca realizada en el siglo XVIII sobre otra anterior gótica del siglo XV. Retablo realizado en escayola por Ramón LLorca Plá en el siglo XX. En el centro del retablo encontramos las imágenes del arcángel San Rafael y de Tobías, obra de Francisco Teruel Francés (siglo XX). Sobre la mesa del altar y en el interior de una caja porta-imágenes en madera, pequeña talla anónima del siglo XVIII representando a Nuestra Señora de los Dolores. En los muros laterales dos tablas del pintor Yáñez de la Almedina representando a Santa Ana, la Virgen y el Niño, mientras que la segunda tabla representa la Anunciación.

Capilla del Sagrado Corazón de Jesús. En el centro del retablo en el interior de la hornacina, imagen de Cristo Sagrado Corazón de Jesús, obra del imaginero valenciano Andrés Lajarín (siglo XX), en la parte inferior del retablo escultura de la Virgen del Pilar.

Acompañan en la capilla una pequeña escultura de Santa Bárbara a la izquierda, mientras que a la derecha la talla es de Santa Teresa de Ávila. En las paredes laterales, a la derecha óleo sobre tabla (siglo XXI) de la beata Sofía Ximenez Ximenez (* Valencia 1876 † Paterna-Valencia 1936), que fue fusilada en Paterna al inicio de la Guerra Civil en 1936, por el mero hecho de ser católica y dar refugio a unas monjas de su propia familia. En el lado izquierdo óleo sobre tabla (siglo XXI) del también beato José Ruiz Bruixola (* Foyos-Valencia 1857 † Gilet-Valencia 1936), sacerdote de esta iglesia de San Nicolás y que también fue fusilado por su condición religiosa. Ambos fueron beatificados por el papa Juan Pablo II como mártires de la Guerra Civil.

Capilla de San Antonio de Padua Retablo de madera en su color natural de estilo barroco realizado en el siglo XX . En el centro del retablo imagen de San Antonio de Padua, talla del siglo XVIII en madera policromada y vestida. Junto al altar talla en madera de Santa Rita de Casia. En los muros laterales podemos ver una serie de pinturas al fresco de carácter decorativo de estilo barroco.

Lado de la epístola (continuando por los pies)

Capilla del Bautismo A los pies del templo, en el lado de la epístola encontramos una pequeña capilla dedicada al sacramento del bautismo. En la misma podemos encontrar el Retablo de la Crucifixión o del Calvario, pintura al temple y al óleo sobre tabla de pino, realizada en 1476 por Rodrigo de Osona (activo en Valencia entre 1440 y 1518). La firma del autor figura en el papel blanco que se puede ver en la parte inferior de la tabla central. Se da la circunstancia que el retablo fue realizado ex-profeso para esta iglesia y desde entonces ha permanecido en el templo. Del retablo faltan los guardapolvos laterales y entre 1849 y 1850 fue recortado dándole forma oval para ajustarlo a una capilla de la iglesia.

En la tabla central vemos a Cristo Crucificado y junto a él y a ambos lados, dos grupos de personas, en un lado personajes masculinos, en el otro femeninos. También destacar la presencia de un perro muerto en el ángulo inferior derecho. En la predela y de izquierda a derecha, vemos a Santa Ana con la Virgen y el Niño Jesús, a continuación San Pedro, La Piedad, San Pablo y el Ángel Custodio de la ciudad de Valencia.

Capilla de San Vicente Ferrer En la hornacina central talla de vestir del santo dominico, obra del escultor Carmelo Vicent. En la hornacina inferior relicario con una reliquia de San Vicente Ferrer, propiedad de la Asociación Vicentina del Altar del Tossal.

En esta capilla fue enterrado el médico valenciano Jaume Roig junto con su esposa Isabel Pellicer. Jaume Roig † 1478, además de médico de la reina María de Castilla (esposa del rey Alfonso el Magnánimo) fue fabriquero y administrador de esta parroquia y además escritor, destacando su obra en verso "El Espill" (El Espejo), una de las obras cumbres del Siglo de Oro Valenciano.

Capilla de la Inmaculada Capilla de estilo neoclásico siglo XVIII. El retablo de madera tallada y en su color natural es obra de José Blesa Prats realizado en el siglo XX. En su centro encontramos una talla en madera policromada de la Inmaculada, obra de José Esteve Bonet en el siglo XVIII. En la parte inferior una imagen yacente en madera policromada de Santa Filomena mártir, obra de José Estupiñá Ribes (* Valencia 1928). A ambos lados, en el retablo, tallas en madera policromada de San Joaquín (a la izquierda) y Santa Ana y la Virgen Niña (a la derecha). San Joaquín y Santa Ana son los padres de la Virgen María. Fueron realizadas en el siglo XVIII por un autor anónimo.

Capilla de San Judas Tadeo Capilla de estilo neoclásico del siglo XVIII. Retablo realizado por Ramón LLorca Plá en escayola (siglo XX). Preside el retablo San Judas Tadeo, apóstol de Cristo, talla en madera policromada realizada en 1981 por Vicente López. LLeva en sus manos un hacha (símbolo de su martirio y el "mandilion" o Santa Faz). En las paredes óleos sobre lienzos de Jerónimo Jacinto de Espinosa (siglo XVIII). A la derecha del retablo encontramos un pequeño devocionario en bronce con la imagen del santo llevando el "mandilion", es de fe acercarse hasta él, tocar la cabeza del Cristo y pedirle una gracia. Recordar que San Judas Tadeo es abogado de las causas perdidas y los casos imposibles.

Esta capilla está unida a una curiosa tradición valenciana conocida como los lunes de San Nicolás. De origen incierto, la tradición dice que hay que acudir tres lunes seguidos hasta esta iglesia de San Nicolás, pasado este periodo de tiempo solicitar a San Nicolás una petición de tipo no material y esta se cumplirá. Es requisito imprescindible realizar el trayecto desde casa a la iglesia en completo silencio. De unos años a esta parte la solicitud de ayuda parece que se ha visto traspasada a San Judas Tadeo y éste es el santo que se encarga de recibir las peticiones previo paso por el devocionario de bronce al que antes hemos aludido. Así todos los lunes es posible ver concurridos grupos de gentes que vienen a solicitar favores una vez cumplimentado el requisito de los tres lunes mencionados.

Puerta de entrada plaza de San Nicolás. Situada justo enfrente a la entrada recayente a la calle Caballeros.

Capilla del Beato Gaspar Bono Capilla de estilo neoclásico del siglo XVIII. Las columnas que sostienen el entablamento son copias de las que podemos encontrar en el Templo de Hera en la ciudad de "Paestum" cerca de Nápoles. Centra el retablo una pequeña urna con los restos mortales del beato Gaspar Bono, titular actual de la capilla, ya que antes estaba bajo la titularidad de la Virgen de la Paz.

En el interior de la capilla cuatro lienzos con imágenes de santos del siglo XX, obras del pintor contemporáneo José Manuel Pozo Serrano. En ellos podemos ver a San Pío X papa, San Juan XXIII papa, San Juan Pablo II papa, María Teresa de Calcuta, Padre Pío, Santa María Goretti, Santa Edith Stein, San Maximiliano María Kolbe, San José María Escrivá fundador del Opus Dei y el beato Álvaro del Portillo.

En los muros laterales de la capilla, óvalos con imágenes pintadas de San Francisco de Borja y San Vicente Ferrer (a la derecha) y San Pedro Pascual y San Vicente Mártir (a la izquierda). Todos ellos santos nacidos en Valencia o ligados a la iglesia valentina.

Capilla del Santo Sepulcro Retablo formado por una imagen de bulto redondo de Cristo Crucificado (siglo XVI) sobre un fondo pictórico realizado por Vicente Macip y su hijo Joan de Joanes. Es el conocido como retablo de la Crucifixión (siglo XVI). En el retablo pictórico solo está representada la cruz de madera por lo que la talla de Cristo viene a complementar el conjunto.

El retablo pictórico está formado por una gran tabla central con una representación del Gólgota y una gran cruz en el centro sobre la que se superpone la escultura de Cristo. En la predela cinco tablas de la Pasión de Cristo: La Oración en el Huerto, El beso de Judas o el Prendimiento, la Flagelación, Camino del Calvario y la Lamentación sobre Cristo muerto. En los laterales del guardapolvos: San Pedro Mártir, San Nicolás de Bari, San Cristóbal y San Sebastian. En el guardapolvos superior: San José y San Vicente Ferrer. En el ático, en el centro tabla del encuentro de Jesús y María camino del Gólgota (El Pasmo), a la izquierda el Arcángel San Miguel y a la derecha el Ángel Custodio de Valencia. En lo más alto del ático Dios Padre.

Bajo el retablo en una urna de cristal, una imagen de Cristo yacente realizada en el siglo XVIII, es el conocido como Cristo del Fossar, titular de la capilla exterior a los pies del campanario y que en tiempos pasados procesionaba en Semana Santa en la procesión del Santo Entierro.

Capilla Mayor Preside el Altar Mayor un retablo barroco realizado en el siglo XVIII en madera dorada con una decoración desbordante y apabullante. El dorado del retablo es de 1867. Este retablo está formado por dos cuerpos, en su centro, una hornacina con los santos titulares del templo flanqueados por tres columnas salomónicas a cada lado adornadas con racimos y pámpanos. Las esculturas titulares son obras realizadas hacia 1940 por Francisco Teruel y Enrique Tamarit. El cuerpo superior lo ocupa un lienzo de Nuestra Señora del Rosario, obra del pintor José Vergara o mas probablemente de Jerónimo Jacinto de Espinosa. Bajo los titulares de la iglesia, el sagrario con una pintura en su frontal de Cristo Eucarístico.

En el presbiterio encontramos además del Retablo Mayor, dos retablos laterales formados por diversas tablas. Ambos realizados a expensas del gremio de pelaires ya que lucen y repiten sus emblemas en los frontales de los mismos. El escudo gremial de los pelaires se compone de unas tijeras de tundir entre dos cardas (instrumento con púas para cardar la lana), y como fondo los palos de Aragón y sobremontado la corona real ya que el escudo es un privilegio del rey de Aragón Juan I otorgado en Mallorca en 1395. La situación de las tablas en el contexto general del retablo seguramente han sido modificadas, nosotros relacionamos las mismas tal y como se encuentran en la actualidad.

En el situado en el lado del evangelio, encontramos el retablo de la Trinidad (siglo XVI). La tabla central ha desaparecido y en su lugar se ha colocado una pequeña tabla de la Verónica de la Virgen en el interior de un ostensorio.

Las cuatro tablas laterales representan a un amplio grupo de personajes, las del lado izquierdo a los apóstoles (reconocibles por sus atributos) y a doctores de la iglesia, mientras que en el lado derecho se representan vírgenes mártires y santos mártires. Entre los reconocibles están: san Dionisio, san Sebastián, san Fabián, san Esteban (con un libro), san Vicente mártir, san Lorenzo, san Jorge y san Pedro mártir (co-titular de la parroquia) entre otros muchos. Entre las vírgenes representadas: santa Cecilia, santa Úrsula, santa Catalina de Alejandría, santa Bárbara y santa Catalina de Siena entre otras. En la parte superior de cada tabla podemos leer las siguientes inscripciones: A tu el gloriós cor dels Apòstols, A tu l'exèrcit de Màrtirs vestit de blanc t'alaba, A tu la Santa Església et proclama per tota la terra y A tu la bellíssima multitud de Verges t'alaba.

En la predela, tres tablas: la creación de las aves, la creación de Adán y Eva y la creación de los mamíferos. En el ático tabla con la coronación de la Virgen por la Santísima Trinidad. Todas estas obras son del pintor Joan de Joanes.

En el retablo situado en el lado de la epístola encontramos el conocido como retablo de san Miguel. La tabla central ha desaparecido y en su lugar encontramos un ostensorio con una pequeña tabla del rostro de Cristo Salvador y a ambos lados cuatro tablas de Joan de Joanes: procesión al monte Gárgamo, la aparición de san Miguel en el castell de Sant Angelo, la batalla de Manfredonia, y la caída de los ángeles rebeldes, todas ellas con escenas en las que el arcángel san Miguel es protagonista. Según se dice en la tabla de la procesión al monte Gárgamo, la figura central que mira al espectador es el autorretrato de Joan de Joanes, aunque tal extremo no ha sido confirmado. Las tres tablas de la predela del retablo representan: el nacimiento de Jesús, la Anunciación y la adoración de los magos. En el ático escena de la circuncisión de Jesús.

Las dos tablas que encontramos en los retablos anteriores: la Verónica y Cristo Salvador, son dos óleos sobre tabla realizados por Joan de Joanes. Ambas formaban parte de un relicario bifaz (de dos caras) que fueron separadas en 1882. En el reverso de una de las tablas se puede leer una inscripción que dice: Apud Valentia anno 1572 (en Valencia año 1572).

La Capilla Mayor se ilumina por ventanales de arcos apuntados con vitrales policromados. Una ventana por cada uno de los lados del polígono. El púlpito situado volado en el lado del evangelio es obra del escultor Tomás Artigues del siglo XVIII.

Los frescos de la bóveda al igual que el resto de las pinturas al fresco del templo son obra de Dionís Vidal realizadas hacia 1700. Vemos la Glorificación de San Pedro Mártir y San Nicolás de Bari en el centro de la bóveda, ambos santos son llevados al Cielo por espíritus angélicos. Alrededor del óvalo que forma la glorificación, distintos doctores de la iglesia: Santo Tomás de Aquino, San Agustín obispo de Hipona, San Gregorio Magno papa, San Ambrosio obispo de Milán, San Jerónimo y San Buenaventura. Una inscripción dividida por silabas a los pies de cada uno de los doctores dice en su conjunto: "Vos estis sal terrae. Vos estis lux mundi (Vosotros sois la sal de la tierra. Vosotros sois la luz del mundo).

Las pinturas del ábside fueron restauradas hacia 1917 por José Renau Montoro, profesor de dibujo y padre del célebre cartelista y dirigente comunista durante la guerra civil Josep Renau; el resto fueron restauradas en 2014.

Capilla de la Comunión A los pies del templo en su lado del evangelio encontramos la puerta que accede a la Capilla de la Comunión por el interior del templo. Capilla en origen de planta centralizada cubierta con cúpula realizada en 1760, ampliada en 1853 con un segundo tramo y una segunda cúpula. Se configura actualmente con una nave rectangular de dos tramos separados por un arco toral. Cada tramo se cubre con cúpula semiesférica sobre pechinas y su interior se recubre con decoración rococó en escayola. La rocalla dorada cubre los muros, las pilastras y las cornisas.

En los muros laterales del segundo tramo (el mas cercano a la puerta de entrada) encontramos dos pinturas murales enmarcados en estucos dorados, son obra del alcoyano Joaquín Pérez, discípulo de Hipólito Rovira y representan uno el "Lavatorio de los pies" y dos "Jesús dando la comunión a los apóstoles". Sobre las pechinas de la cúpula de la entrada las cuatro virtudes cardinales mientras que las pechinas de la cúpula más cercana al Altar Mayor encontramos a los cuatro evangelistas. Obras también del pintor Joaquín Pérez. Además zócalos cerámicos del siglo XVIII. En el arco de separación de ambos tramos el escudo de la familia Melchor Valenciano, de origen guipuzcoano aunque su apellido diga lo contrario. Preside el Altar Mayor una imagen de Nuestra Señora de los Desamparados situada en un retablo barroco.

En el muro que enfrenta con el Altar Mayor y en su lado de la epístola, una lápida en mármol gris con letras doradas dice: "Ad majorem divini cultis splendorum fideliumque commodum vicerector beneficiari, devoti hanc fabricam suis sumptibus amplificandam curantur an. 1853 Catharina Arripe et Almenar deauravit, exornavitque an.1853". Lo que nos viene a decir que las obras de ornato de la capilla fueron sufragadas por Catalina Arripe Almenar en 1853.

En la capilla podemos encontrar además cuatro lienzos: La glorificación de Santa Lucía, obra del siglo XVIII de Luis Antonio Planas, San Bartolomé, San Juan Evangelista y un lienzo de pequeño formato de San Francisco Javier.

El exterior de la Capilla de la Comunión ha sido restaurada en el año 2013 y luce en este momento en todo su esplendor. Sobre la portada adintelada formada por dos cuerpos sin ninguna decoración escultórica se alza un Cáliz Eucarístico. Por encima de este, un óculo permite la iluminación interior de la capilla. Se han hallado restos de una inscripción que no permiten su lectura. A los lados del segundo cuerpo dos óvalos que originalmente irían pintados pero que en la actualidad se han perdido. Bajo la moldura que marca las divisiones de los cuerpos de la capilla una inscripción en forma de friso dice: AÑO   1760.

El campanario situado a los pies de la iglesia en el ángulo sur-oeste, dispone de tres cuerpos: el primero construido en sillería alcanza la altura del tejado de la iglesia y se corresponde con la antigua estructura gótica. Los dos cuerpos restantes fueron realizados entre 1658 y 1755 en ladrillo. El tercer cuerpo aloja las campanas. El cupulino o remate del campanario se terminó en 1757. El campanario a falta del remate final se terminó en 1755 para conmemorar el tercer centenario de la canonización de San Vicente Ferrer.

Este remate lo forma un arco de medio punto en cada uno de sus lados, flanqueados por pares de pilastras toscanas. Se remata por una balaustrada y una linterna formada por dos cuerpos: el inferior cuadrado con contrafuertes y el superior octogonal.

Las campanas desaparecieron durante la Guerra Civil a excepción de la conocida como Vicent. El nombre de sus campanas en la actualidad son: El Vicent (1755), El Colau (1947), Triple (1947), Pere la gran (1948) y El Miquel (1976). El campanario fue restaurado en el año 2007 como bien nos lo recuerda una lápida conmemorativa situada en la base del mismo. En el primer cuerpo del campanario podemos leer una lápida en piedra que dice en latín: Expensis Hieronimi Fer/ rer mercatoris et pav / l sae escorigvela cony / vgvm turris hec extr / vcta est anno 1658. Que en mi latín olvidado traduzco como: "A expensas de Jerónimo Ferrer comerciante y de Paula Escorihuela conyuges levantaron esta torre en el año 1658".

Patrimonio mueble Otro elemento de la iglesia es el órgano barroco del siglo XVIII situado en el presbiterio en el lado del evangelio. Además la iglesia posee un soberbio cáliz y una patena de fina orfebrería romana de fines del siglo XV, regalo al parecer del Papa Alejandro VI a su tío Calixto III. En la sacristía un retablo de Rodrigo de Osona, fechado en 1476 en cuya tabla central encontramos un Calvario. También un retablo de Yáñez de la Almedina.