Iglesias románicas - Comarca Alta Ribagorça
La Vall de Boí - Lérida


Antecedentes históricos
El Valle de Boí (en castellano Bohí) se encuentra en la comarca del Alta Ribargorça, provincia de Lérida y se encuentra atravesado por el río Noguera de Tor. Las iglesias románicas del Valle de Boí fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco el 30 de Noviembre del año 2.000, en total fueron nueve las declaradas:


1- Iglesia de Sant Feliu de Barruera 2- Iglesia de Sant Joan de Boí 3- Iglesia de Santa María de Cardet
4- Iglesia de la Asunción de Coll 5- Iglesia de la Natividad de Durró 6- Ermita de San Quirce de Durró
7- Iglesia de Santa Eulalia de Erill la Vall      8- Iglesia de Sant Climent de Tahull      9- Iglesia de Santa María de Tahull

Iglesias del Valle de Boí - La Vall de Boí
Iglesia de
Sant Feliu

Barruera
Iglesia de
Sant Joan

Boí
Iglesia de
Santa María

Cardet
Iglesia de
La Asunción

Coll
Iglesia de
La Natividad

Durro
Ermita de
San Quirze

Durro
Iglesia de
Santa Eulalia

Erill la Vall
Iglesia de
Santa Cecilia

Senet
Iglesia de
Sant Climent

Taüll
Iglesia de
Santa María

Taüll
Ermita de
San Quirze

Taüll
Iglesia de
Santa María

Viu de Llevata


Hacia el 795 el rey de los francos Carlomagno crea una serie de condados al Sur de los Piríneos con el objetivo de establecer una línea de defensa que protegiera el reino franco del ataque de los musulmanes, este conjunto de condados serían conocidos como la Marca Hispánica. Estos condes que al principio son de ascendencia franca irían sustiuyendose poco a poco por nobles de ascendencia hispánica. Tanto unos como otros guardaban fidelidad al rey de los francos. Ya en el siglo X algunos de estos condes van consiguiendo parcelas de independencia hasta que llega un momento en que se desvinculan totalmente del reino franco para convertirse en condados independientes, siendo el primero y tal vez el mas importante el condado de Barcelona, que se haría independiente con el conde Wilfredo el Velloso.

La "Vall de Boí" formaba parte de los dominios de los señores de Erill, dependiente en ocasiones del condado de Ribagorza y en otras de los condes de Pallars, Obispado de Urgell-Lérida o Roda de Isábena-Huesca según el momento. El primer señor de Erill del que consta documentación era Ramón de Erill y tenía su centro en Erilcastell (comarca de la Alta Ribagorça).

Por lo que respecta al Valle de Boí, el territorio formaba parte del condado de Ribargorça bajo la autoridad del conde franco de Tolosa. Con la indepedencia política y religiosa, naceran dos nuevos condados: Ribagorça y Pallars y de este último otros dos más, Pallars Sobirà y Pallars Jussà. Nuestro Valle quedará bajo el area de influencia de estos condados según el momento y las circunstancias, para acabar finalmente adscrito en 1025 al condado de Pallars Jussà. Con la cesión del territorio en 1192 por parte de la condesa Dulce de Pallars Jussà al rey de Aragón Alfonso II el Casto, el valle de Boí pasa a formar parte de la Corona de Aragón.

Parecida situación se da en el aspecto religioso, si en un primer momento el Valle pertenece a la diócesis de Urgell, la creación del nuevo obispado de Roda de Isábena en Huesca hará que durante los siglos X y XI las lealtades religiosas esten divididas en función de las lealtades políticas. Finalmente el Valle quedará bajo la mitra de la diócesis de Urgell. En 1140 se firma la concordia entre los dos obispados por el cual el Valle de Boí se adscribe a Urgell a excepción de la Iglesia de la Asunción de Coll que queda unida a Roda de Isábena.

Las iglesias del Valle de Boí tienen una serie de características comunes que les confiere una unidad de estilo. Realizadas durante los siglos XI y XII, sus constructores, formadas por cuadrillas itinerantes de maestros y canteros de origen lombardo, levantan bajo el patrocinio de los señores de Erill, todo un conjunto de iglesias. Sorprende el número de iglesias que han llegado hasta nosotros en un lugar relativamente pequeño como es el Valle de Boí, pero más nos debe de sorprender si consideramos que muchas otras construcciones no han llegado hasta nosotros, por lo que su número podría haber sido mayor. Se cree que el inmenso botín de guerra que los señores de Erill lograban arrebar a los musulmanes fue utilizado para levantar toda esta serie de iglesias en el Valle.

Las principales características de las construcciones románicas del valle son: influencias y planteamientos lombardos, planta basilical de tres naves o nave única acabadas en ábsidea semicirculares, cubiertas con bóvedas de cañón, lo que obliga a construir gruesos muros que sotengan el peso de la bóveda, elevada altura que alcazan las torres-campanarios y las cabeceras triabsidiales con decoración a base de arcos ciegos apoyados en lesenas o bandas lombardas como también son conocidas. Otra característica es que tanto el exterior como el interior se encontraban decoradas con pinturas murales, muchas de las cuales se encuentran en la actualidad en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, otras han salido legal o ilegalmente a territorio extranjero y unas pocas, las menos, permanecen "in situ". De las pinturas que decoraban el exterior de las iglesias todo se ha perdido ya que el entorno frio y húmedo del territorio no ayudaba a su conservación. Por último cabe destacar el taller de escultura de Erill, de donde salieron con destino a estas igleisas, un gran número de imágenes de Cristo, Virgenes sedentes, y Calvarios ralizados en madera policromada que hasta nosotros han llegado en ocasiones fragmentariamente.

Las torres-campanarios ademas servían de comunicación entre los pueblos ya que todas las iglesias de valle están comunicadas visualmente entre sí.

Se considera dentro del arte románico del Valle de Boí tres periodos:
• Periodo prerrománico (no se conservan casi restos y algunos restos se utilizaron en construcciones posteriores.
• Mediados siglo XI (primer momento constructivo), lombardo arcaico, pertenecen las iglesias de Sant Joan de Boí, Sant Martí de Taull (restos) y el ábside de la iglesia de Barruera.
• Principios siglo XII influencia lombarda o románico pleno.

Otras Iglesias románicas de la comarca Alta Ribagorça
• Monastir de Santa María de Lavaix
Esglèsia de Santa María de Corroncui
Esglèsia Sant Climent D'Iran
Esglèsia de Sant Bartomeu D'Erta
Esglèsia de Sant Sadurni D'Esperan
Ermita de Sant Salvador D'Irgo
Esglèsia de Sant Romà de Casós
Església de la Mare de Déu de les Neus d'Irgo
• Església de Sant Esteve D'Igüerri
• Església de Sant Llorenç de Sarais
Ermita de Santa Margarida de Peranera
• Església de Santa Eulàlia de Peranera
• Església de Santa Victoria i Sant Iscle
• Església de Sant Marti de Castellars
Església de Sant Esteve de Ventolà
• Sant Esteve de Castelló de Tor
Església de Sant Martí de Llesp
Ermita de Sant Nicolau
Ermita de Sant Salvador de Barruera